
Porque, si dejamos la nostalgia y la melancolía aparte, y nos entregamos a la sinceridad, las aventuras de Goku y compañía acabaron convirtiéndose en un Nekketsu repetitivo, falto de ideas y de proyección a largo plazo. Seguramente no por culpa de un Toriyama centro de las exigencias, sino por la enorme demanda de más y más peleas por parte del gran público. Entendible que cerrase ese capítulo de su vida (aunque parece que ahora se vuelve a abrir con Dragon Ball Super) y quisiera volver a su otra faceta: La de la aventura imprevisible y la comedia absurda con personajes entrañables que tanto brilló con el Dr. Slump. Y esa nada más y nada menos es la esencia de Cowa!
Seguid conmigo si queréis saber cómo huyó Toriyama de Goku.