viernes, marzo 14, 2025

El Diablo está en los detalles. La Cosa de John Byrne y Ron Wilson

Corría el año 2007 cuando decidí darme una vuelta con mi padre por el Rastro de Plaza de Castilla con la esperanza de que algún cómic cayera en mis manos en esa mañana soleada de domingo. De repente en un puestecillo apareció un tebeo Forum de La Cosa, con una portada, ejem, florida.


No os voy a engañar, en ese momento no sabía que estaba dibujada por el gran John Byrne. Bastante tenía con intentar adivinar cómo el sobrino favorito de la Tía Petunia acabó con colección propia. ¡Y encima poco después sería sustituido por Hulka en Los 4F tras lo ocurrido en las primeras Secret Wars! Pero era otra cosa (nunca mejor dicho) la que me llamaba la atención: el bueno de Benjamin Grimm aparecía en el corner box con una peluca y las manos llenas de flores. (?)


No tenía ningún sentido esa imagen. Por aquel entonces imaginé que era alguna broma de la persona que llevaba el puesto, o de algún lector previo que había dibujado por encima víctima del aburrimiento. Pasaron algunos meses hasta que pude encontrar más números de aquella serie de La Cosa y... ya había perdido ese aspecto tan peculiar. Volvía a tener menos pelo que una sepia.


Tuvieron que pasar dieciséis años para que, preguntando por ello en el chat de los compays del podcast Spiderman: Crónicas del Daily Bugle, Julián de Es La Hora de Las Tortas me descubriera que esta rareza fue consecuencia del Mes de los Editores Asistentes de 1984 en Marvel. Tradición anual en la que por un mes se les dejaba campar a sus anchas para que hicieran guiños en las cabeceras que supervisaban.


Ann Nocenti, que era la editora asistente de esta cabecera y de otras (The New Defenders, The Incredible Hulk o Marvel Fanfare), optó por trastear con las cornerbox poniéndose además a ella misma en el cuerpo de El Ángel o de Hulk en sus respectivas series. 





No puedo dejar pasar la oportunidad de nombrar otras creaciones del experimento: la dupla Franklin Richards-Tía May uniéndose para enfrentarse a Galactus en Marvel Team-Up o una de las historias más recordadas (y publicadas) del trepamuros: El niño que coleccionaba Spiderman, del Amazing Spider-Man #248.




Bien, amigos. Con esto se cierra el misterio de La Cosa con pelazo en un cómic publicado en España en agosto de 1989, mes de mi nacimiento. ¿Cómo no iba a dedicarle una entrada en mi blog?